• La empatía es una herramienta que, además de mejorar tus relaciones interpersonales, te abrirá puertas en tu vida personal y profesional.
Por: Verónica Veana
 

Bien lo dijo el psicólogo estadounidense Carl Rogers: "Ser empático es ver el mundo a través de los ojos del otro y no ver nuestro mundo reflejado en sus ojos".

La empatía, para comprender su definición de forma práctica, es ponerte en los zapatos de los demás. Es procurar entender el por qué la otra persona piensa o actúa de determinada manera, antes de juzgar o pensar que "nosotros habríamos hecho algo diferente". Aunque quizá suena complicado, debemos poner en práctica el ser empáticos para mejorar nuestras relaciones interpersonales.

Anteriormente, cuando hemos hablado de la gran importancia que ahora tienen las habilidades blandas para destacarte como la persona ideal para ocupar un puesto o, simplemente, distinguirte de los demás, mencionamos a la empatía como una cualidad básica para lograrlo, ya que nos ayuda a conectar mejor con las personas, nos posiciona como personas respetuosas y, por lo tanto, respetables, ya que tenemos la capacidad de comprender diferentes posturas sin sentirnos agredidos o poco valorados; es decir, podemos escuchar y hacernos escuchar. Nos ayuda a ampliar nuestras perspectivas al darnos la oportunidad de escuchar otras ideas y opiniones: hacemos sentir bien a la gente que nos rodea, lo que nos permite dejar una huella positiva en ellos; nuestro liderazgo se incrementa al permitirnos conocer las necesidades de los demás y también nos permite mejorar nuestra inteligencia emocional, ya que ponemos en práctica el identificar las emociones propias y ajenas.


                                                                                                                                                    
                                                                           Foto: Elevate

Si crees que la empatía no es una habilidad que se te da fácilmente o de forma natural, aquí te comparto 3 pasos para ser más empático:

1. Debes querer hacerlo
Muchas veces nos cuesta trabajo entender a los demás porque simplemente no consideramos el intentar ponernos en su lugar. Estamos tan aferrados a nuestras opiniones, emociones y razones, que buscamos defenderlas a toda costa antes de imaginar que puede haber un panorama distinto o que, aunque otra persona haya vivido exactamente lo mismo que nosotros, su percepción y experiencia es diferente. De esta manera, debes querer abrirte a esta nueva conexión con la gente. Debes salir de tu burbuja de percepciones para comprender que el que está delante de ti también tiene su propia burbuja, y ninguna de las dos es más cierta o más real que la otra.

2. Debes trabajar en tu escucha activa.
Cuando estés con alguien, debes sumergirte por completo en la plática que estás teniendo para no perder detalles de nada. Una comunicación efectiva también se basa en la escucha activa, que es aquella donde no solo expresas tus opiniones, también escuchas y observas a tu interlocutor. La gente dice más cosas con su lenguaje no verbal que con sus palabras, así que debes prestar atención a su lenguaje corporal, entonación que utiliza al hablar, ya que todo te va dando señales de su verdadero sentir. 

3. No te tomes nada personal.
Baja la guardia. Ser empático no quiere decir que debes estar de acuerdo con las opiniones de los demás; significa que respetas esas opiniones aunque no concuerdes con ellas. Por esta razón, no debes tomarte nada personal; de lo contrario, terminarás molesto o incluso tu autoestima puede llegar a mermarse creyendo que debes justificar tus opiniones y pensamientos para convencer a la otra persona de que eres tú quien está en lo correcto. No juzgues las opiniones o hechos de los demás; recuerda que ellos tienen sus razones para pensar o actuar de determinada manera, así como tú tienes las tuyas.

Y como un plus, te diré: ¡Practica!
Como cualquier otra habilidad, se requiere de práctica para mejorar tu empatía. En cada conversación que tengas agudiza tus sentidos para identificar las señales que te está dando tu interlocutor ¡te sorprenderás de todo lo que te estabas perdiendo y empezarás a disfrutar los beneficios de ser alguien empático!

¡El mundo necesita más gente empática! Empecemos a practicar, desarrollar y contagiar a los demás de esta actidud.

Comentarios potenciados por CComment