Seguramente te resulta muy familiar la palabra "bronceado". En los últimos años se ha incrementado el deseo de tener una piel bronceada o dar el efecto de mayor color en la misma; sin embargo, es importante saber que existen riesgos importantes de esta práctica. ¡Descúbrelos!

Si bien el exponerse a los rayos solares puede ser benéfico para el mejoramiento de las funciones celulares - y más en los casos como la osteoporosis, reumatismo, psoriasis, acné, entre otras afecciones- también es necesario saber que las dosis altas pueden perjudicarnos,

La radiación solar está clasificada en tres tipos: UVA, UVB, y UVC; éstos últimos son los más peligrosos de todos, afortunadamente los detiene la capa de ozono. Los UVB provocan melanomas, manchas en la piel y cáncer con efectos acumulativos a largo plazo. Los UVA, si bien son los menos dañinos para el cuerpo, los daños cutáneos a largo plazo son mayores que los UVB.

                                                                                            
                                                                                                                           Foto via: Belleza unComo

El tema de lucir un color dorado en la piel pareciera estar relacionado al estatus económico, también está enfocado a no ver una piel pálida y sin vitalidad, sólo que la realidad de las cosas es que es una práctica que puede ocasionar una obsesión y al mismo tiempo causar daños irreparables a la salud.

Cuando la exposición para broncearse es solar, hay que tomar en cuenta que debe aplicarse bloqueador solar con protección de filtros UVA y UVB, recuerda que éstos últimos tienen un efecto profundo en la piel y repercusiones considerables; también hay que tomar en cuenta que el sol tiene un efecto peligroso en el cabello al combinarse con el aire, se le llama oxidación y por ello es que el cabello va cambiando de tonalidad al exponerse constantemente al sol; además de su ya conocido efecto deshidratante y por eso ocurre la resequedad en el cabello, así como la falta de brillo.

Ahora bien, si la exposición es en cámaras de bronceado es distinto el daño, pues las cámaras tienen filtros especiales para sólo dejar pasar los rayos UVA -recuerda que la exposición constante a estos provoca daños a la piel considerables como manchas faciales y corporales y pecas- aunque con la falta de mantenimiento de estas cámaras de bronceado hace que con el tiempo pierdan los filtros y también permitan el paso de los UVB, lo que produce peores efectos en la piel.

Una exposición mayor a 30 veces al año en las cámaras de bronceado es peligrosa y una mayor a 50 veces puede provocar envejecimiento prematuro de la piel, así como quemaduras, manchas, arrugas, flacidez y, en el peor de los casos, melanoma o cáncer de piel por agotamiento de los sistemas de autodefensa.
                                                             
                                                                        
                                                                                                              Foto via: www.ehowenespanol.com

Recuerda: el uso de los bloqueadores solares no se limita sólo a la exposición solar; debe de ser de uso diario, ya que los rayos UVA y UVB están presentes en el medio ambiente, inclusive dentro de tu casa u oficina, ya que tienen la capacidad de atravesar muros y ventanas.

Cuida tu piel, recuerda que es el órgano más grande del cuerpo.