- Visita este lugar que te ofrece noches estrelladas, espectáculo de delfines, deliciosos platillos y una inolvidable experiencia.
Por: Raúl García
¡Llegó el viernes!, y con él también se acaba nuestro estrés semanal a causa de las tareas diarias y del tráfico con interminables horas que pasamos en él mientras tratamos de llegar a nuestro destino. Por todas esas y más razones, nos merecemos de vez en cuando una escapada lejos de lo cotidiano para desconectarnos aunque sea por unos días de nuestros quehaceres cotidianos, y ¿qué mejor que una escapada a la playa?, pero no a una abarrotada de turistas ni de grandes hoteles, sino más bien a un lugar donde lo principal es descansar bajo el sol sin más preocupación que la de: ¿dónde comeremos hoy? Y con esto me refiero a Costa Esmeralda, en Veracruz.
Para llegar, se toma la carretera en dirección a Cardel, en Veracruz, y de ahí se sigue la Costera; es decir, la carretera federal 180, que te llevará por la costa hasta Tuxpan. Se puede acceder por autobús, tomando los de la línea ADO, que son autobuses de primera clase y económicos. Se puede llegar hasta Tecolutla o San Rafael, del centro de la ciudad son alrededor de 8 horas. El taxi de la estación de autobuses no es caro, va desde los 50 pesos hasta los 150, dependiendo de donde llegues.
Si llegas en la madrugada, tendrás una maravillosa bienvenida con la luna llena reflejándose en el mar, el viento fresco en tu rostro hace que el sueño y lo cansado del viaje se te olvide por completo y sólo pienses en poder tomar un café en la playa, mientras esperas un amanecer espectacular.
Dependiendo de cuál sea tu destino para hospedarte, existen varias playas que puedes visitar; las más importantes de Costa Esmeralda son:
La Guadalupe, Ricardo Flores Magón, La Vigueta, Playa Oriente, Monte Gordo, Casitas y Maracaibo. Caminado en ellas puedes admirar la naturaleza, las diferentes aves silvestres y, si tienes suerte, un fósil pequeño de alguna estrella de mar antigua que se convierte en un regalo perfecto o inclusive un recuerdo único que no podrás comprar en ninguna tienda.
Costa Esmeralda está cerca de pequeños pueblos costeros muy peculiares, entre ellos están: Tecoluta, que se encuentra ubicado dentro de un sistema natural de humedales costeros y desde siempre han proporcionado un ambiente cálido. Como pretexto especial para encontrarte con la naturaleza, puedes tomar un tour con algún pescador local para realizar un recorrido en los manglares y maravillarte con la gran diversidad de vida que contienen estos humedales únicos.
El otro pueblito pintoresco es San Rafael, donde se conservan muchas tradiciones francesas en las familias más antiguas como la elaboración casera del queso, el pan y el vino. Durante el verano, en este bello pueblo se visten de fiesta por su tradicional carnaval efectuado en la segunda semana de julio. Aquí lo principal para apreciar es su gastronomía, que está compuesta por platillos de tendencia francesa, así mismo en la elaboración de vinos de frutas de la temporada, como naranja, capulín, guanábana, maracuyá, durazno, entre otros. No puede faltar en tu recorrido.
¿Quieres comer lo tradicional de esa zona de nuestro país, pero no quieres separarte un segundo del mar? Existe un restaurante llamado “Los Moros”, donde podrás probar las clásicas acamayas (son un tipo de camarón con un sabor único), además de los diferentes pescados preparados de diferentes maneras con los que podrías pasar todo un día sin terminar de probar el menú completo.
Pero, si lo que quieres es no trasladarte y quedarte en tu hotel, entonces puedes preparar una parrillada de mariscos frescos de la región frente al mar y, si tienes suerte, quizá -solo quizá- podrás observar delfines salvajes no muy lejos de la costa, un espectáculo increíble que difícilmente lo podrás apreciar en alguna otra playa; además será un recuerdo que permanecerá en tu memoria por muchos años.
El agua puede estar tibia o un poco fría, dependiendo de la temporada en que decidas viajar, pero nada de qué preocuparse, tiene un oleaje suave y reconfortante. Lo que sí debes tener en cuenta es que es una área natural donde aún existen muchas de sus especies nativas en la costa y en el mar, así que disfrútalo, pero con precaución.
Entonces ¿qué esperas para escaparte con tu pareja o en familia para estar en contacto con la naturaleza en un playa de ensueño, rodeado de exquisitos platillos y personas increíbles? Si tiene suerte, también podrás liberar tortugas marinas; una experiencia inolvidable.
¿Dónde quedarte?
Existen varias zonas donde puedes acampar bajo las estrellas en los llamados trailer Parks.
¿Qué llevar?
Además de lo clásico, como toallas y gafas oscuras, procura llevar repelente de insectos, pero sólo el que es biodegradable para proteger las áreas naturales.
¿Qué no llevar?
Abrigos y chamarras gruesas.
¿Qué más hacer?
¿Qué debes probar?
No olvides disfrutar de nuestro país, porque como el nuestro ¡ninguno lo es!
Para llegar, se toma la carretera en dirección a Cardel, en Veracruz, y de ahí se sigue la Costera; es decir, la carretera federal 180, que te llevará por la costa hasta Tuxpan. Se puede acceder por autobús, tomando los de la línea ADO, que son autobuses de primera clase y económicos. Se puede llegar hasta Tecolutla o San Rafael, del centro de la ciudad son alrededor de 8 horas. El taxi de la estación de autobuses no es caro, va desde los 50 pesos hasta los 150, dependiendo de donde llegues.
Si llegas en la madrugada, tendrás una maravillosa bienvenida con la luna llena reflejándose en el mar, el viento fresco en tu rostro hace que el sueño y lo cansado del viaje se te olvide por completo y sólo pienses en poder tomar un café en la playa, mientras esperas un amanecer espectacular.
Dependiendo de cuál sea tu destino para hospedarte, existen varias playas que puedes visitar; las más importantes de Costa Esmeralda son:
La Guadalupe, Ricardo Flores Magón, La Vigueta, Playa Oriente, Monte Gordo, Casitas y Maracaibo. Caminado en ellas puedes admirar la naturaleza, las diferentes aves silvestres y, si tienes suerte, un fósil pequeño de alguna estrella de mar antigua que se convierte en un regalo perfecto o inclusive un recuerdo único que no podrás comprar en ninguna tienda.
Costa Esmeralda está cerca de pequeños pueblos costeros muy peculiares, entre ellos están: Tecoluta, que se encuentra ubicado dentro de un sistema natural de humedales costeros y desde siempre han proporcionado un ambiente cálido. Como pretexto especial para encontrarte con la naturaleza, puedes tomar un tour con algún pescador local para realizar un recorrido en los manglares y maravillarte con la gran diversidad de vida que contienen estos humedales únicos.
El otro pueblito pintoresco es San Rafael, donde se conservan muchas tradiciones francesas en las familias más antiguas como la elaboración casera del queso, el pan y el vino. Durante el verano, en este bello pueblo se visten de fiesta por su tradicional carnaval efectuado en la segunda semana de julio. Aquí lo principal para apreciar es su gastronomía, que está compuesta por platillos de tendencia francesa, así mismo en la elaboración de vinos de frutas de la temporada, como naranja, capulín, guanábana, maracuyá, durazno, entre otros. No puede faltar en tu recorrido.
¿Quieres comer lo tradicional de esa zona de nuestro país, pero no quieres separarte un segundo del mar? Existe un restaurante llamado “Los Moros”, donde podrás probar las clásicas acamayas (son un tipo de camarón con un sabor único), además de los diferentes pescados preparados de diferentes maneras con los que podrías pasar todo un día sin terminar de probar el menú completo.
Pero, si lo que quieres es no trasladarte y quedarte en tu hotel, entonces puedes preparar una parrillada de mariscos frescos de la región frente al mar y, si tienes suerte, quizá -solo quizá- podrás observar delfines salvajes no muy lejos de la costa, un espectáculo increíble que difícilmente lo podrás apreciar en alguna otra playa; además será un recuerdo que permanecerá en tu memoria por muchos años.
El agua puede estar tibia o un poco fría, dependiendo de la temporada en que decidas viajar, pero nada de qué preocuparse, tiene un oleaje suave y reconfortante. Lo que sí debes tener en cuenta es que es una área natural donde aún existen muchas de sus especies nativas en la costa y en el mar, así que disfrútalo, pero con precaución.
Entonces ¿qué esperas para escaparte con tu pareja o en familia para estar en contacto con la naturaleza en un playa de ensueño, rodeado de exquisitos platillos y personas increíbles? Si tiene suerte, también podrás liberar tortugas marinas; una experiencia inolvidable.
¿Dónde quedarte?
Existen varias zonas donde puedes acampar bajo las estrellas en los llamados trailer Parks.
- Hotel EL Doral
- Best Western Hotel Noray
¿Qué llevar?
Además de lo clásico, como toallas y gafas oscuras, procura llevar repelente de insectos, pero sólo el que es biodegradable para proteger las áreas naturales.
¿Qué no llevar?
Abrigos y chamarras gruesas.
¿Qué más hacer?
- Visita el Río Tecolutla.
- Visita el Museo Marino.
- La parroquia de San Miguel Arcángel.
¿Qué debes probar?
- Róbalo en caldo, tomate, cebolla, ajo, epazote, chile jalapeño.
- Robalete frito, ensalada, especies y pepinos en rebanadas.
- Bobo en caldo, tomate, cebolla, ajo, epazote, chile jalapeño.
- Tamal de elote, masa, carne y chile.
No olvides disfrutar de nuestro país, porque como el nuestro ¡ninguno lo es!
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