• Descubre todo lo que puedes encontrar en el Museo del Ejército y el Museo Histórico Naval de México.

Por: Raúl García
 
Ya todos hemos estado en el Centro Histórico recorriendo los puntos más representativos de la guía turística, como el Zócalo, la Catedral o el Templo Mayor, lugares -sin duda alguna- representativos de la fusión de culturas, pero también existen 2 lugares llenos de heroísmo, valentía y de una palabra que en nuestros días está desapareciendo: lealtad, junto con un gran orgullo nacional.

El primero de ellos es el Museo del Ejército y Fuerza Aérea , el cual está localizado en la calle de Filomeno Mata, antes callejón de Betlemitas, casi en contra esquina de museo MUNAL y atrás del Edificio de Correos. 

                                                                 

El museo te recibe con  El jardín de la Triple Alianza, que se estableció en 1427 y funcionó hasta la llegada de los españoles. Sus relieves representan a Izcóatl (Serpiente de Obsidiana), gobernante de los mexicas; Netzahualcóyotl (Coyote hambriento o en ayuno), gobernante de Texcoco; Totoquihuatzin (Entrada de aves), gobernante de Tlacopan o Tacuba; héroes  prehispánicos de culturas sobresalientes del México antiguo.  
                                     
                                                                                                

Con sólo un vistazo uno siente un profundo orgullo y la grandeza de lo que fue el gran imperio mesoamericano, ya que no son las representaciones clásicas de los indígenas: encorvados, pequeños y con la mirada al suelo, éstos -al contrario- firmes, dignos y orgullosos, transmitiendo esos sentimientos al verlos.

Justo en la recepción del museo encontrarás los diferentes uniformes del ejército mexicano, algunos para la zona del desierto; otros para bosque o selva.  Te darás cuenta de lo importante que es el camuflaje para el ejército.

                                                                                                     

Desafortunadamente, no se permite tomar fotografías dentro del museo, esto es por seguridad y por reglamento interno.  

Al comenzar tu recorrido empezarás por la época prehispánica con una exposición de tocados, armas, escudos y cascos de guerreros águila y jaguar,  junto con sus estandartes, continuando con las armaduras de los españoles, espadas y cotas de malla, siguiendo a través de la historia con uniformes de la época de la colonia y batalla de independencia.  

Además, encontrarás una pintura al final del pasillo principal, la cual narra una impresionante batalla que al admirarla uno se convierte en parte de la misma sintiendo por un momento el calor de la lucha.  

Detén tu recorrido en esta obra de arte, trata de identificar cada detalle y verás que toda la pintura tiene una historia hasta en las pequeñas partes de la misma.

Después, continúa con el recorrido y encontrarás parte de la artillería que se ha utilizado en las guerras o batallas a lo largo del ejército mexicano, hasta la etapa de la Segunda Guerra Mundial, ¡Inclusive el fusil del mismísimo Don Porfirio Díaz!

                                                                                             
 
El museo es pequeño y no tardarás mucho tiempo en recorrerlo en su totalidad, pero no por eso deja de ser impresionante. Todo el personal que trabaja en el museo es parte del ejército mexicano y son personas amables que con gusto te aclararán cualquier duda.
 
  • Admisión:
Entrada libre a todo el público
  • Servicios Totalmente GRATUITOS:
- Servicios de visitas guiadas.
- Biblioteca del Museo.
- Conferencias.
- Proyecciones.
- Audiciones musicales.
  • Otros servicios:
- Librería.
- Tienda de regalos.
- Cafetería. 

Siguiendo con el mismo tema de las fuerzas armadas mexicanas, no debe faltar en tu vista el Museo Histórico Naval; éste se encuentra a menos de una calle del Museo del Ejército.  Seguramente cientos de veces has pasado por ese lugar y no lo has notado, se encuentra enfrente del Palacio de Bellas Artes, casi enfrente del MUNAL y sobre el eje central, a una calle de la torre Latinoamericana ¿ya sabes cuál es?

¡El Palacio Postal!, en el cuarto piso, y para llegar a él subirás por el elevador antiguo con sus detalles dorados de esa época donde cada elemento era importante para hacer una composición de materias y arquitectura digna de un palacio.

                                                                                                                         

El museo muestra las diferentes etapas de la historia naval de nuestro país, comenzando con la  primera batalla marítima de aztecas contra españoles en el lago de Texcoco.  

Descubrirás el nacimiento de la Armada de México tras el triunfo de la lucha de Independencia, historias y réplicas de las flotas invasoras de Francia en 1838 y la de Estados Unidos en 1846-1847, también podrás ver fotografías de la defensa del puerto de Veracruz, donde los héroes sin nombre salieron de sus casas a repeler al invasor, y que -aún sin  balas- seguían peleando calle por calle, balcón por balcón con lo que encontraban.  Un orgullo y respeto que México nunca debe permitirse olvidar.

                                                                                             

También descubrirás hechos ocurridos durante la Revolución Mexicana y la participación de México en la Segunda Guerra Mundial.

Además, muchas réplicas de barcos a escala e incluso uno del tamaño de una camioneta.

                                                                                                             

Terminarás tu recorrido con esta leyenda:

 “Hemos luchado desesperadamente
en una brega en apariencia vana,
contra una dura mar incomprensión…
Y sin embargo Nó;
Ha medio siglo que zarpó el galeón
con la proa apuntada hacia el futuro;
y el futuro es el mar… ¡Estoy seguro!”
         -
Contra almirante Rueda Medina
 
Si tienes pensado dar una vuelta por el Centro Histórico de la Ciudad de México no olvides pasar por estos dos pequeños y a la vez grandes museos donde el orgullo de ser mexicano está en cada paso, y ser parte de un mundo donde el honor, la valentía y el amor por nuestra patria han formado una gran nación llamada México.
 
¿Qué llevar?
  • Ropa cómoda
  • Zapatos tipo urbanos o tenis
  • Cámara fotográfica, en el Museo Ejército no te dejan tomar fotografías, pero en el Museo Histórico Naval sí se te permite
 
¿Qué no llevar?
  • Comida dentro del Museo
  • Si llevas mochilas, los museos cuentan con guardarropa
 
Recuerda que en estos muesos trabaja personal del ejército mexicano; sigue las indicaciones que te piden, así evitarás que te llamen la atención y que se te pida que salgas del lugar.
 

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