•  Cuando surge esa vocecita interna ¿la escuchas o la ignoras?

Por: Paulina De La Mora
 

¡Hoy hablaremos de la intuición.!

En sí, la definición de esta palabra es la de la facultad de comprender las cosas al instante, sin necesidad de realizar un razonamiento complejo.

Muchas veces la utilizamos como sinónimo de presentimiento; tener esa sensación de que algo va a ocurrir. Es esa vocecita interior que te dice si sientes que algo está mal o bien; ese primer chispazo que se nos viene a la cabeza cuando nos pasa algo.

Cuando aprendemos a reconocer la intuición, obtenemos una gran herramienta para tomar de mejor manera nuestras decisiones, pero aprender a reconocerla no es fácil, más si nunca le hemos puesto en práctica. Aprender a reconocer ese chispazo, como lo mencionamos arriba, es cuestión de práctica, porque ocurre muy rápido, antes de que la mente empiece a funcionar y comience todo el proceso  lógico.

                                                                                     
                                                                                                                      Foto via: Método Silvia de VIda

Cuando intuimos es como si nuestro cerebro nos diera una idea que no sabemos de dónde ha salido, pero es la forma como procesamos la información inconscientemente, el cerebro va conectando datos y así lo va asociando uno a uno.

Para  llevar a cabo la intuición de manera constante y efectiva, es necesaria la disciplina. Una de las mejores formas para empezar a relacionarnos con ella es aprendiendo a acallar o controlar la mente, enfocándonos y siendo conscientes de nuestras emociones y cuerpo. 

La meditación es una excelente manera de destapar tu intuición, ya que el autoconocimiento que llega por medio de ésta práctica ayuda a entendernos mejor y a actuar con base en nuestro ser.

Si quieres usar y aprovechar tu intuición, debes creer en ella. Cuando tengas una reacción determinada que te impulse a tomar alguna decisión, no la ignores; de igual menera, si una sensación te impide tomar la decisión, lo mejor es parar y tomarla en cuenta. Piensa cómo te sientes en ese momento y haz una reflexión de por qué eso no es buena idea. Esta será la mejor manera de tomar la decisión correcta para ti.

Si tienes una corazonada o algo te está haciendo sentir incómod@, háblalo con alguien más y comparte tus dudas y sensaciones al respecto. No todo en nuestra vida debe estar basado en procesos lógicos y racionalizados; recuerda que muchos aspectos de nuestra vida tienen que ver con los sentimientos.

Cuando despiertas a tu intuición, ésta genera señales inmediatas y constantes, el punto es saber interpretarlas adecuadamente para poder tener acceso a muchos conocimientos que guardamos, pero de los cuales no habíamos sido conscientes.

Escucha tu voz interna, por algo está ahí y te está hablando. Aprende a darle un lugar; no la ignores.  Tómate un tiempo para ti, para estar sol@ por un rato.  No olvidemos que las intuiciones, más que pensarse, se sienten.  Debemos aprender a escuchar a nuestro cuerpo, hacer una pausa y notar cómo nos sentimos.
 

Comentarios potenciados por CComment